Llevo un par de días fuera de la Fundación CTIC. Estuve por Barcelona. Como en todas las ciudades por esta fecha, la decoración navideña ya está en las calles, comercios y centros comerciales. En Barcelona han puesto árboles ecológicos con placas solares.  En base a mi interés por las «Tecnologías Verdes», el planteamiento me ha parecido interesante, pero los «nativos del lugar» se quejan de que sin luz solar (estos días que hay mal tiempo en BCN) o cuando el sol no da por igual a la superficie del árbol, éste no se ilumina como debiera. 

Han instalado seis árboles con un coste de 214.000 euros.  A priori, parece una inversión elevada, pero los responsables políticos subrayan que estos árboles se reutilizarán en las próximas navidades. Así que al carácter ecológico de la iniciativa, hay que sumar otra de responsabilidad presupuestaria para los próximos años  (al menos así lo manifiestan).

Me estoy despistando con la intención de este post. La cuestión es que pasear por Barcelona, y recibir ayer los dos primeros correos felicitando la navidad, me han hecho reaccionar: 

¡¡¡ Estamos en Navidad!!! 

Así que a prepararse con todo lo que viene por delante en estos días y disfrutar, reencontrarse con amigos, renovar deseos e ilusiones  y en defnitiva, pasarlo bien y ser algo más felices estos días aparcando rutinas de trabajo, olvidando los malos ratos  y afrontando el nuevo año con energía y optimismo.

Al llegar a la Fundación CTIC me di cuenta de que también había llegado el espíritu de la  Navidad mientras estaba en BCN. Y también lo hizo  con vocación ecológica.

Me encontré un árbol de Navidad nuevo, un soporte  reciclado de unas jornadas con  una «@» en la  copa  y varios CD´s adornando nuestro árbol.

Esta noche, se lo enseñé a Lidia, mi hija de siete años. Le gustó mucho, le pareció una idea fantástica y se preguntaba cómo era posible que tuviera luces (los reflejos de los CD´s) sin que hubiera bombillas.

 Cumplió su objetivo: ecológico y  transmitió ilusión y sorpresa  a los más pequeños, así como a algunos mayores.

Y por supuesto, me encontré con nuestro enorme Papa Noel, que desde la primera planta saluda a todo el que le mira devolviéndole un guiño y una sonrisa.

Felices Fiestas y a gozar !!