Bibliotecas Públicas, Políticas de Inclusión Social y Puntos de Acceso TIC
Muchos países de América Latina y el Caribe han avanzado de manera significativa en el desarrollo de iniciativas y políticas públicas relacionadas con las TIC (tecnologías de información y comunicaciones), especialmente en temas de dotación y conectividad, infraestructura tecnológica, acceso público a la información, sistematización de trámites para los ciudadanos, entre otros. Algunos países incluso han llegado más allá y cuentan con grandes avances en temas de transparencia, participación ciudadana e inclusión social, y muchos son parte de la Alianza de Gobierno Abierto (Open Government Partnership).
Sin embargo, a pesar del progreso, aún existe una gran brecha para muchos Latinoamericanos ya que los enfoques han sido principalmente en temas de acceso y conectividad y no en contenidos y apropiación. Por lo tanto, aunque exista nueva información y servicios disponibles en línea, no se conoce su disponibilidad y muchos ciudadanos no tienen el acceso o las habilidades para utilizarlos. Además, no cuentan con la adecuada orientación y capacitación en el uso de estas nuevas oportunidades para mejorar sus vidas y las de sus comunidades. La Región necesita instituciones locales fuertes que ayuden a las personas a adaptarse y beneficiarse de la sociedad de la información y del conocimiento. Más de 21,000 bibliotecas públicas en América Latina y el Caribe tienen el potencial de satisfacer esas necesidades y de ser un aliado importante y confiable a nivel comunitario para brindar acceso, información y formación y convertirse en puntos de acceso a las TIC promovidos como espacios comunitarios abiertos a todos.
El papel de las bibliotecas en el desarrollo
Las bibliotecas han sido, por siglos, espacios respetados y confiables en las comunidades, donde se accede a la información y al conocimiento. Esto no ha cambiado con el paso del tiempo; lo que sí ha cambiado son las formas y formatos de acceso a la información y por esto, las bibliotecas alrededor del mundo se están transformando para convertirse en espacios comunitarios y de conocimiento en los que se puede acceder a computadores, internet, libros electrónicos e incluso a personas. La integración con las TIC ha hecho de las bibliotecas modernas un espacio de encuentro natural para el conocimiento y el acceso a la información.
En muchos lugares de América Latina y alrededor del mundo, la biblioteca es el único lugar donde las personas pueden tener acceso libre e irrestricto a la información y al conocimiento, y una conexión entre el Gobierno y sus ciudadanos. Por ejemplo, en Chile y Colombia, las bibliotecas están equipadas para convertirse en actores claves en sus comunidades. Como parte de la sociedad del conocimiento, éstas constantemente evolucionan e innovan, diseñando nuevas estrategias para llegar a las personas y para atender a sus necesidades de desarrollo:
En Medellín, Colombia, organizaciones de los sectores público y privado decidieron llevar computadores e internet a las bibliotecas de la región metropolitana en el 2006. Hoy en día, Medellín y toda la región metropolitana cuenta con más de 60 bibliotecas que proveen acceso gratuito a las TIC a todos los ciudadanos. Las bibliotecas equipadas con TIC y con bibliotecarios formados se han convertido en centros integrales en los que la comunidad se apoya para la participación comunitaria, la formación en una gran variedad de temas y el involucramiento con la juventud. En las comunidades pobres y aisladas de Chile, las bibliotecas proveen acceso a computadores y a internet a través del programa BiblioRedes. Una red de 412 bibliotecas públicas y de 18 laboratorios de formación con computadores y acceso a internet han capacitado a un cuarto de millón de chilenos en alfabetización digital.
Estos dos ejemplos dan una idea del movimiento que se empieza a consolidar alrededor de Bibliotecas para el Desarrollo. Iniciativas como Beyond Access están fomentando este movimiento y posicionando las bibliotecas en las agendas de desarrollo locales, nacionales e internacionales. Este articulo se basa en la experiencia, documentos y estudios realizados por Beyond Access y Makaia, así como visitas a bibliotecas en diferentes países, entrevistas con actores claves de los sectores público, privado y la sociedad civil, y se complementa con otros estudios e información y los aprendizajes de experiencias exitosas de bibliotecas alrededor del mundo. Gracias a esta información, se presentan algunas recomendaciones en el contexto latinoamericano para la promoción de las Bibliotecas para el Desarrollo:
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Las bibliotecas deben ser reconocidas como aliados estratégicos de los Gobiernos para facilitar el acceso a la información por parte de todos los ciudadanos. Los Gobiernos necesitan asegurar que su información llegue a todos los ciudadanos sin importar su ubicación o condiciones demográficas. Las bibliotecas públicas son una solución costo-eficiente para este reto y generalmente ya están incluidas en los presupuestos municipales o nacionales. Con inversiones sociales adicionales en tecnología, apropiación y desarrollo de capacidades, pueden resurgir como actores de desarrollo sostenibles y arraigados en las comunidades que apoyan el trabajo en sectores como salud, cultura, ciencia y tecnología, juventud, participación ciudadana, entre otros. Las agendas digitales, planes de gobierno en línea y planes de acción de Gobierno Abierto deben incorporar a las bibliotecas públicas como aliados claves para el cumplimiento de sus objetivos y deben asegurarse que los ciudadanos puedan utilizar las herramientas, información y equipos de forma productiva. Para esto las Bibliotecas deben estar incluidas dentro de las Políticas Públicas como punto de contacto entre el gobierno y el ciudadano y viceversa.
- Los compromisos hacia la sociedad de la información deben involucrar compromisos hacia las instituciones que la apoyan. La inversión en bibliotecas públicas complementaría el fuerte compromiso y progreso de muchos gobiernos hacia la construcción de una sociedad de la información y el conocimiento, que vaya más allá del acceso, a proveer capacidades y ser canales de servicios sociales. Existen diferentes fuentes de financiamiento en los países de América Latina y el Caribe, que a través de acciones coordinadas y compromisos adecuados pueden contribuir a la modernización de las bibliotecas. Las bibliotecas son un aliado valioso para llegar a los ciudadanos, ya que se generalmente se encuentran en todas las regiones de un país.
- Aprovechar las ventajas de la ubicación y espacios de Bibliotecas Públicas. Las Bibliotecas en América Latina ya existen y generalmente están ubicadas en lugares estratégicos de las comunidades. Una vez se reconozca el rol importante que tienen las Bibliotecas, se deben apoyar de manera explícita y realizar las inversiones sociales necesarias. Es importante contar con apoyo para su expansión y mejoras en infraestructura, equipamiento y personal, y fomentar la utilización de los espacios de las bibliotecas para la instalación de centros de acceso a las TIC, en vez de crear nuevos espacios e infraestructuras.
- La formación en necesidades modernas de información debe estar disponible para los bibliotecólogos y bibliotecarios. Los libros y servicios de referencia siempre serán fundamentales para las bibliotecas públicas, sin embargo, no pueden ser los únicos servicios en una biblioteca moderna. El personal de la biblioteca debe ser capaz de crear alianzas, identificar las necesidades de su comunidad y facilitar su participación, convirtiéndose en ‘infomediarios’ que cuenten con las habilidades y el conocimiento para orientar a los ciudadanos en el uso de la información para mejorar sus vidas. A los bibliotecólogos y bibliotecarios se les debe ofrecer capacitación continua, redes para compartir experiencias y motivación constante para ser líderes