El interés del modelo de empresa social
En los últimos años hemos presenciado la emergencia de nuevos enfoques basados en soluciones de mercado para proveer servicios básicos en un contexto de lucha contra la pobreza y la inclusión. Las organizaciones sin ánimo de lucro están diseñando nuevas estrategias para alcanzar una mayor independencia económica de donaciones privadas y subvenciones públicas.
Dos principales motivos han propiciado este cambio de estrategia hacia la autosostenibilidad. En primer lugar, la inestabilidad económica reinante en todo el mundo en los últimos años ha limitado las aportaciones de recursos a organizaciones sin ánimo de lucro.
Por otro lado, diferentes innovadores sociales en los últimos años han demostrado que es posible atender una causa social limitando al mínimo o prescindiendo de ayudas y donaciones. Adicionalmente, la autosostenibilidad no solamente se impone “desde fuera”, sino que diferentes análisis apuntan a que la autonomía económica mejora el desempeño de las organizaciones con fines sociales. Las organizaciones sostenibles no solamente gozan de una probada eficiencia operativa, sino que están normalmente orientadas a lograr un mayor impacto social. Un modelo robusto y eficiente puede ser replicado y aumentado, impactando más vidas.
El modelo de empresa social representa una solución a la sostenibilidad de las organizaciones con fines sociales, ya que basa su esencia en la consecución de un fin social a través de soluciones de mercado, es decir, mediante la realización de actividades de venta de productos y servicios. En este sentido, el esquema de empresa social puede servir a los telecentros para crear oportunidades de sostenibilidad económica en el tiempo y conseguir un mayor impacto social. Entre sus posibles servicios están algunos coherentes con políticas públicas, que los propios entes públicos pueden entonces financiar, como sesiones de alfabetización digital, servicios de e-gobierno o formación a docentes para integrar las TIC en la educación. También caben otros con alta demanda personal, como sean asesoría a pymes o cursos técnicos avanzados en TIC, que podrían ser en parte financiados por los individuos o empresas que los reciban. Por otra parte, los telecentros pueden ofrecer productos de naturaleza digital cuya distribución se facilita precisamente por ser digitales, como puedan ser aplicaciones de software, contenidos especiales (ej. álbum digital familiar) o espacios web (sitios o blogs personalizados).
Cómo diagnosticar la concordancia de los telecentros con el modelo de empresa social
El Grupo de Investigación en Organizaciones Sostenibles de la Universidad Politécnica de Madrid ha desarrollado un modelo y una herramienta de diagnóstico que tienen como objetivo identificar en qué medida están presentes las características de la empresa social en una determinada organización, en este caso, en los telecentros. La figura 1 representa el modelo organizativo de empresa social, que contiene los principales aspectos que en nuestra opinión se deben estudiar en una empresa social para analizar su desempeño. Este modelo está basado en la investigación académica que el Grupo ha desarrollado en los últimos cuatro años y combina una perspectiva teórica y práctica: está fundamentado en las principales referencias académicas y también en las prácticas observadas en el estudio de diferentes empresas sociales reales.
El análisis de esta figura permite identificar ciertos rasgos de la empresa social en la operativa general de los telecentros: su proposición de valor social, su intención de generar el mayor impacto posible, su estrecha relación con los usuarios, su orientación a la sostenibilidad. Este modelo (que hasta aquí nos sirve para describir cómo funciona una empresa social) creemos que carecería de utilidad práctica si no sirviera a las organizaciones para la toma de decisiones y mejorar en su día a día. Por este motivo, el modelo se acompaña de una herramienta de diagnóstico que permite evaluar los elementos en los que los telecentros pueden trabajar para “parecerse más” a una empresa social. La herramienta se compone de un cuestionario y permite identificar información relevante sobre el funcionamiento de un telecentro:
- Describir cómo trabaja en la actualidad el telecentro objeto de análisis.
- Identificar las ventajas competitivas de los telecentros y potenciarlas para obtener el máximo rendimiento de ellas.
- Analizar las capacidades inherentes a los telecentros que podrían potenciarse para conseguir un mejor desempeño: su estructura de red, sus fuertes lazos en las comunidades, su versatilidad para ofrecer múltiples productos y servicios, etcétera.
Los telecentros son entidades que realizan una función pública fundamental en la provisión de información y comunicación en todo el mundo. Los modelos de empresa social presentan un potencial interesante para mejorar la sostenibilidad económica de organizaciones con fines sociales, como los telecentros. Deseamos que el proceso de diagnóstico señalado pueda servir de ayuda a los telecentros en su gestión diaria. Y estamos convencidos que la observación y estudio de casos reales de telecentros (o redes de telecentros) que ya operan exitosamente como empresas sociales aportará nuevas ideas y factores beneficiosos para mejorar dichos modelos y diagnósticos. [1]
[1] En la actualidad la Universidad Politécnica de Madrid y la Red de Redes de Telecentros de Latinoamérica y el Caribe (Red LAC) están iniciando un proyecto piloto para aplicar esta herramienta en la mejora de la gestión de telecentros e incorporar modificaciones acordes a la herramienta y modelo de empresa social empleados.
Para más información sobre la empresa social y su aplicación a los telecentros puede contactar con manuel.acevedo@telecentros.com o ramon.fisac@upm.es.